El poder de uno: La Revolución rusa
Imaginen lo siguiente...
Imaginen estar en el rol de una mujer campesina en Rusia en 1916 y observar como los cultivos se pudren en el suelo. Hay tantos hombres peleando en la Gran Guerra que escasean las manos para obrar en los cultivos, incluso con mujeres como ustedes labrando duro la tierra. Imaginen que tienen una prima que vive en la ciudad capital rusa de Petrogrado y trabaja con otras mujeres en las fábricas. Cada día, ella se forma fuera de la tienda de abarrotes al amanecer antes de tener que ir a la fábrica a cumplir su turno. Pero ella siempre se va sin la energía suficiente para mantener su casa tibia y con poco alimento para dar de comer a su familia. Imaginen escuchar informes del campo de batalla, en donde quizás su esposo y hermano sigan con vida y luchando. Escuchan que los hombres se están quedando sin suministros e incluso sin municiones. Se les ordena luchar desarmados o tomando los rifles de sus camaradas al morir en batalla. Imaginen que tú y tus vecinos ya llevan un par de años viviendo así. Y luego llega el invierno de 1916-1917, demostrando su amargura frialdad.
Ahora imaginen que escuchan sobre la muerte del zar (el emperador de Rusia) en 1918 y el ascenso de un nuevo líder. El líder propone un plan inmediato no solo para establecer la paz y llevar los hombres a casa, sino que también cubre las necesidades para familias como las suyas. También formula un plan a largo plazo para cambiar el poder de la clase superior gobernante. Él transferirá ese poder a las personas pobres, pero trabajadoras como usted y su familia, que trabajan en las fábricas y los campos. Este hombre, Vladimir Lenin, ha escrito sobre sus ideales por años. Pero ahora su partido político socialista, los bolcheviques,1se han apoderado del liderazgo del desmoronado Imperio Ruso. ¿Pueden entender por qué Lenin trajo un tipo de esperanza que indicaba que el mundo desesperado en el que vivían algún día pudiese tener paz y orden?
El trasfondo de la Revolución rusa
La Revolución rusa de 1917 fue un suceso importante para todo el mundo, no solo para Rusia. Para ver cómo sucedió todo esto, hemos de remontarnos una década en el pasado. En 1905, el zar ruso, Nicolás II, se negó a retirarse de una guerra humillante con Japón. En respuesta, muchos rusos salieron a las calles en protestas pacíficas y marcharon hacia el Palacio de Invierno en Petrogrado (San Petersburgo). Pero en un día que se conoció como el "Domingo Sangriento", las fuerzas militares del zar acribillaron a cientos de manifestantes. Esto provocó protestas masivas y una guerra civil en todo el país. Las protestas finalizaron solo cuando el zar aceptó formar una asamblea de representantes conocidos como la Duma.
Durante esta guerra civil de 1905, los obreros rusos se organizaron y comenzaron a formar grupos llamados soviéticos. Estos soviéticos (grupos de obreros) les brindaron una identidad comunitaria como obreros que se reunían por un objetivo en común. Mientras tanto, en muchos otros países, el nacionalismo unificaba con eficacia a las personas en base a culturas e identidades compartidas. Pero en Rusia, casi no existía la clase media y una muy poco común identidad “nacional” sobre la cual desarrollar esta idea. Muchas gente no pertenecía a las etnias rusas y menos de la mitad de la población hablaba incluso el idioma ruso. Rusia era geográficamente masiva, socialmente diverso y estaba económicamente dividido. Los revolucionarios políticos como Vladimir Lenin aprovecharon estas divisiones y comenzaron a unir a las personas en una comunidad en función de sus roles como trabajadores.
La Revolución rusa de 1917: ¿Qué pasó? ¿Por qué es importante?
Una década más tarde, Rusia había perdido a más gente que cualquier otro país en la Primera Guerra Mundial. Los soldados, trabajadores de las fábricas y los campesinos eran presa de carencias desesperadas. A medida que el invierno implacable de 1916-1917 seguía su marcha, la gente comenzó a quebrantarse.
Las protestas comenzaron el 7 de marzo de 1917, con la huelga de los trabajadores de la fábrica en Petrogrado. Las mujeres salieron a la calle al día siguiente para celebrar el Día Internacional de la Mujer y se unieron a los trabajadores de la fábrica para protestar contra el gobierno y su política de racionamiento de alimentos. El pueblo ruso estaba harto del zar y de sus políticas, y deseaban desesperadamente pan para alimentar a sus familias. Pronto las calles se llenarían de unos 200.000 protestantes. Pedían que el zar Nicolás II dejara el poder, por la salida del ejército ruso de la Primera Guerra Mundial y que terminara la racionalización de la comida y el combustible. Durante los próximos días, reinaría el caos en la ciudad. Partes de los militares estacionados en Petrogrado se rebelaron y se unieron a los manifestantes mientras los oficiales huían al Palacio de Invierno.
El zar respondió quitándole los poderes a la Duma. Sin embargo, la Duma decidió designar a un Comité Provisional en un intento por recuperar el control de la ciudad. El 15 de marzo, Nicolás II abdicó (renunció a su poder) y dejó el Comité Provisional de la Duma para gobernar Rusia. El Comité Provisional se comprometió a seguir luchando con los Aliados contra las Potencias Centrales. Pero este no era el deseo de las personas. Los bolcheviques usaron para ventaja propia y apelaron por el apoyo de la población rusa. El resultado fue un acuerdo en el cual la Duma y el consejo soviético de Petrogrado pudiesen compartir el poder.
La primera fase de la Revolución rusa de 1917 estaba completa, pero la revolución estaba lejos de terminar. En los meses siguientes, los partidarios de la Duma y el consejo soviético se enfrentaron respecto a qué reformas instituir. Uno de los principales problemas era si seguir luchando en la Primera Guerra Mundial. También hubo divisiones dentro de los consejos soviéticos en toda Rusia, con ciertos grupos compitiendo por hacerse con el control. La situación en Rusia seguía siendo tensa y los obreros mantenían las protestas. Durante este período, la interrogante era: ¿Qué grupo o facción asumiría el control del gobierno finalmente? La respuesta terminó por llegar junto al partido de Vladimir Lenin, los bolcheviques. Quienes vieron las continuas protestas como una señal de la lucha de clases necesaria para establecer su forma de gobierno socialista que eventualmente llevaría el nombre de comunismo.
En noviembre de 1917 los bolcheviques, encabezados por Lenin, tomaron el control de la capital de Petrogrado. Inmediatamente eliminaron el gobierno provisional. Luego pusieron bajo arresto a los partidos de oposición. En marzo de 1918, los bolcheviques hicieron otro movimiento que los ayudó a obtener más apoyo de la gente: Rusia firmó un tratado con Alemania que puso fin a la invasión alemana de Rusia y sacó a los rusos de la Primera Guerra Mundial. Aunque estaban fuera de la guerra global, Rusia todavía estaba en una guerra civil. Los bolcheviques siguieron peleando contra sus oponentes en el Gobierno Provisional y de otros partidos políticos hasta 1921. La victoria fue para los bolcheviques. Pero tras casi 10 años de lucha en contra de un enemigo extranjero y en la guerra civil, la población de Rusia seguía pasando penurias.
Ahora sabemos quién estuvo al mando, ¿pero como administrarían el país? Los bolcheviques bajo el liderazgo de Lenin realizaron cambios que establecieron el comunismo en oposición al capitalismo. Esto significa que la tierra y los medios de producción (como las fábricas) pertenecían a la gente. Lenin instituyó casi inmediatamente reformas para eliminar la propiedad privada e individual de la tierra y las fábricas. El comunismo, una forma de socialismo en el cual el estado controla la economía, también transformó las ideas de comunidad. Bajo el mandato de Lenin, los bolcheviques buscaban unir al pueblo a través de conexiones de clase basadas en sus roles como trabajadores. Lenin observaba la clase como el gran unificador y su deseo era reducir la importancia de otros tipos de conexiones comunales como la religión. Todos formarían una comunidad de obreros trabajando por el bien común de todos los integrantes de la nación. Lenin prometía paz, estabilidad y disposiciones, pero también otorgar poder a personas que nunca antes habían tenido esta oportunidad.
Si bien sabemos que la revolución cambió profundamente a este país, ¿qué ocurrió con el mundo? En primer lugar, al sacar a Rusia del conflicto, la revolución cambió la dinámica de la Primera Guerra Mundial. En segundo lugar, representa un cambio importante del imperio a nación-estado. Los últimos tres imperios fundamentados en el territorio del mundo terminaron en 1911 (China), 1917 (Rusia) y 1922 (el Imperio Otomano). Tercero, La Revolución rusa permitió tener la primera nación-estado comunista en el mundo. El comunismo se convirtió en una alternativa al capitalismo y en una inmensa fuerza política durante el siglo XX. La influencia del comunismo no solo se dejó sentir en Rusia y en otros países como China, en donde se alojó, sino también durante el transcurso de la Guerra Fría que duró casi medio siglo y que aquejó a todo el mundo.
Después de la Revolución rusa
Aunque por el momento, nuestra historia realiza una pausa en Rusia. En 1922, tanto la guerra mundial como la guerra civil en Rusia habían terminado, y Rusia ahora se había convertido en una nación-estado. Pasó a convertirse en la Unión Soviética (más conocida como URSS o Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas). Bajo el mandato de Lenin, había más pan, terreno y paz, pero pagando el precio de la represión. También había una nueva forma de organizar la comunidad nacional. Aunque Lenin murió en 1924, el liderazgo comunista continuaría bajo el nuevo líder de la Unión Soviética, Josef Stalin.
La transición del Imperio Ruso a la Unión Soviética había respondido a las preguntas de quien lideraría y cómo lo harían. La pregunta ahora era: ¿cómo mantendrían el poder? Si bien la noción del capitalismo había estado rondando durante un siglo, el comunismo parecía un concepto nuevo y joven. Entonces, ¿cómo una joven Rusia comunista sobreviviría dentro de un mundo de naciones capitalistas? ¿Y cómo lo haría dentro de este país geográficamente inmenso y socialmente diverso que esperaba, e incluso obligaba, a formar parte de esta nueva forma de construir una comunidad? A medida que continúen su aprendizaje sobre la historia que siguió a este momento, verán que estos desafíos tuvieron un gran impacto. Estos desafíos no solo cambiarían a un solo país en el plazo de un año. Cambiarían el curso de la historia mundial por el resto del siglo XX.
1 Los bolcheviques comenzaron como un partido obrero que deseaba reformas socialistas para Rusia. Lenin dirigió esta rama del partido socialista y pidió la propiedad pública de los medios de producción (fábricas) y la eliminación del capitalismo, o la propiedad privada de las empresas. Los bolcheviques se convertirían más tarde en el Partido Comunista Ruso. El comunismo es una ideología política que aboga por el control público (estatal) de la economía. En teoría, el comunismo pide que la comunidad posea todas las propiedades, incluidas empresas, y que las personas compartan las ganancias en base a sus contribuciones y necesidades.
Fuentes
Brenton, Tony. Was Revolution Inevitable?: Turning Points of the Russian Revolution. London: Oxford UP, 2017.
Bulliet, R.W., Crossley, P.K., Headrick, D.R., Hirsch, S.W., Johnson, L.L., Northrup, D. The Earth and Its Peoples: A Global History (6th ed). Stamford, CT: Cengage Learning, 2015.
Figes, Orlando. A People’s Tragedy: The Russian Revolution: 1891-1924. New York, NY: Penguin Books, 1998.
Marples, David R. Lenin’s Revolution: Russia, 1917-1921. London: Routledge, 2014.
Millar, James R. (Ed.). Encyclopedia of Russian History. New York, NY: MacMillan, 2004.
Rappaport, Helen. Caught in the Revolution: Petrograd, Russia, 1917-A World on the Edge. New York, NY: Macmillan, 2017.
Reiman, M. About Russia, Its Revolutions, Its Development and Its Present. Frankfurt am Main: Peter Lang AG, 2016.
Smele, Jonathan. The ‘Russian’ Civil Wars, 1916-1926: Ten Years That Shook the World. London: Oxford UP, 2016.
Nicole Magie
Nicole Magie es profesora asistente en Olivet College en Michigan. También es miembro desde hace mucho tiempo de la World History Association y la Midwest World History Association y escribió para World History Connected.
Créditos de las imágenes
Este trabajo tiene licencia CC BY 4.0 excepto lo siguiente:
Portada: Revolución rusa de 1917: Lenin hablando de los trabajadores de la fábrica Putilov, en Petrogrado, 1917. Pintura de Isaak Brodsky (1883-1939). Galería Nacional, Praga, República Checa © Photo by Leemage/Corbis via Getty Images.
Vladimir Lenin dando un discurso en la Plaza Sverdlov de Moscú al Ejército Rojo que iba de salida a luchar en la Guerra polaca-soviética, 1920. Por Grigory Goldstein, dominio público. https://commons.wikimedia.org/wiki/File:Lenin_Speech_in_May_1920_(cropped).png
La impresión de un artista desconocido del Domingo Sangriento, 1905. Por Ivan Vladimirov, dominio público. https://commons.wikimedia.org/wiki/File:The_Russian_Revolution,_1905_Q81561.jpg#/media/File:The_Russian_Revolution,_1905_Q81561.jpg
Mujeres reunidas para el Día Internacional de la Mujer el 8 de marzo de 1917 en Petrogrado. A medida que más mujeres se unían a la multitud, comenzaban a protestar y a exigir pan del zar. Esta fecha conmemora el comienzo de la Revolución rusa de 1917. Por el Museo Estatal de Historia Política de Rusia, dominio público https://commons.wikimedia.org/wiki/File:1917_International_Women%27s_Day_-_Petrograd.jpg#
Afiche de propaganda soviética, 1920. Muestra “lo que la Revolución de octubre le concedió a la mujer trabajadora y campesina” con respuestas como “jardín de infantes” y “biblioteca” escritas en los edificios. Dominio público. https://no.m.wikipedia.org/wiki/Fil:SovietWoman1920.jpg